La llegada del Año Nuevo del calendario lunar es la festividad más importante que se celebra en China. Se recibe encendiendo la mecha de decenas de petardos y fuegos artificiales que, según la tradición, sirven para espantar a los malos espíritus. Las famílias se reunen en torno a mesas repletas de comida y bebida mientras se preparan para lanzar los mejores deseos de cara al próximo año. En Hong Kong, antigua colonia británica que se reintegró a la República Popular China en 1997, esta fiesta también tiene la mayor importancia y miles de personas llegan a la ciudad para tomar parte en los festejos. Entre las distintas celebraciones destaca un torneo organizado por la Asociación de Fútbol de la isla que, este año, cuenta con la participación de las selecciones olímpicas de China, Australia y Jamaica junto con una representación de jugadores de la Liga hongkongnesa.
La Copa se juega en tan solo dos jornadas, el primer y el cuarto día del Año Nuevo Lunar (18 y 21 de febrero). Jamaica fue la vencedora de esta edición tras vencer en los penaltis a China en la final. Los Reggae Boyz habían accedido al partido decisivo tras dejar en la cuneta el Hong Kong League XI también en la tanda de penaltis, mientras que el seleccionado olímpico chino ganó con comodida (2-0) a Australia, que terminó la competición en tercera posición.
Los Socceroos y los caribeños han utilizado esta copa para preparar los Juegos Olímpicos 2008 mientras que China, quien tiene garantizada la entrada automática como anfitrión, acaba de concluir una sesión de entrenamiento de un mes en Europa (lo más visto de ella fue una lamentable pelea entre jugadores durante un partido contra el Queen’s Park Rangers).
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